Antes de iniciar un programa para perder peso, es conveniente estar convencidos de que realmente vais a trabajar en él para conseguir buenos resultados.
Es muy importante que evaluéis hasta dónde estáis dispuestos a llegar a corto, medio y largo plazo.  Si no estáis lo suficientemente motivados para introducir cambios, es porque no estáis preparados para invertir a nivel de esfuerzo y por  tanto será mejor que aplacéis la decisión de continuar  adelante y volver a retomar la idea cuando estéis realmente motivados.
Es muy importante coger el programa con ganas, para alcanzar los objetivos porque sino os podéis sentir defraudados y sin ánimos para intentar ningún otro.
¿Cómo alcanzar el éxito en un programa para perder peso?
Tened en consideración los pros y los contras, beneficios y sacrificios a los que os llevará realizar el tratamiento. Para ello, realizar un ajuste de expectativas es fundamental, esto es, tener en cuenta qué puedo obtener y cuánto voy a tener que poner de mi parte.
Un ejemplo de metas razonables para empezar una tratamiento de pérdida de peso sería:
–    Tener mejor salud
–    Evitar el ir adquiriendo cada vez más peso
–    Sentirme mejor físicamente, con más energía
–    Sentirme orgulloso de mi mismo  por estar consiguiendo con mi esfuerzo algo que quiero
–    Tener mejor apariencia
–    Estar atractivo
–    Poder comprarme ropa que siempre me ha gustado
–    …

Para obtener estos beneficios tendrás que hacer un trabajo personal. Estos son ejemplos de “sacrificios” que puedes estar dispuesto a realizar:

–    Trabajar duro y privarme de algunas cosas
–    No comer con tanta frecuencia mi alimento preferido
–    Vencer la pereza que supone empezar a hacer ejercicio físico
–    …
Se trata de tener en cuenta unos beneficios y unos sacrificios realistas ya que todo lo realmente importante que uno quiere conseguir, requiere un esfuerzo. Sin embargo no se trata de martirizarse ni de privarse de todo, sólo de algunas cosas que uno decida.

Perder peso no garantiza conseguir la felicidad ni resolver problemas con los demás. Hay que ser realistas y no dejarnos llevar por ideas irracionales.
La persona que tenga una motivación parecida a ésta. Es la que más cerca estará del objetivo deseado.