Por otra parte, el informe indica que el 48,08 por ciento de la población era sedentaria en su actividad laboral o habitual y que el 80,3 por ciento era considerado como no activo en tiempo libre. Asimismo, el consumo de alimentos tenía un patrón alejado de los objetivos nutricionales con baja ingesta de fruta y verdura y alta de productos cárnicos. Los hombres eran, en términos relativos, un 36 por ciento más sedentarios que las mujeres en su actividad laboral, y resalta que al disminuir la edad aumentaba el sedentarismo, llegando al 59,96 por ciento en el grupo de 18 a 29 años. Entre hombres, la actividad física más practicada era montar en bicicleta, seguida de footing y fútbol. Las mujeres, por su parte, hacían sobre todo gimnasia de mantenimiento, natación y bicicleta. El informe indica que el sedentarismo para la actividad habitual/laboral seguía una tendencia ascendente, sobre todo, en mujeres. Pero también se detecta un ascenso grande en hombres los tres últimos años que debe vigilarse. Sin embargo, la inactividad en tiempo libre se mantiene bastante estable, aunque las diferencias de género tienden a aumentar. En el caso de los hábitos alimenticios, el informe indica que el consumo medio per cápita de leche era de 1,3 raciones/día y que el 13,3 por ciento, no consumió ninguna cantidad. Si se incluyen los derivados lácteos, el consumo aumentaba a dos raciones diarias y sólo el 5,9 por ciento no realizó ninguna ingesta. El 60,2 por ciento de las mujeres y el 50 por ciento de los hombres realizó algún consumo de leche desnatada. La ingesta media de bollería, galletas y productos de pastelería fue de 0,6 raciones/día y el 49,4 por ciento de la población consumió algún alimento de este grupo en esa etapa. Además, el 9 por ciento consumió dos o más raciones. La media de consumo de fruta fresca fue de 1,2 raciones al día, que aumentó a 1,5 si se incluyen los zumos y conservas. El consumo de verduras fue de 1,1 raciones/día. El 4,9 por ciento de la población no consumió nada de fruta o verdura en las últimas 24 horas, y el 49 por ciento consumió dos raciones o menos (54,5 por ciento en hombres y 43,8 por ciento en mujeres). Además de ser mayor el consumo en mujeres, éste aumenta con la edad. Ellas hacen más dieta El consumo medio de productos cárnicos fue de 1,4 raciones/día (0,9 raciones corresponden a carne y el resto a derivados, la mayoría embutido). El 84,6 por ciento consumió en las 24 horas anteriores algún alimento de este grupo. El consumo fue mayor en hombres que en mujeres y disminuye con la edad. El 49 por ciento de los entrevistados consumió pescado en las 24 horas anteriores (incluye moluscos, crustáceos y conservas) y la media per cápita fue de 0,6 raciones/día. El consumo aumenta con la edad. El 17,41 por ciento de la población realizó algún tipo de dieta en los últimos 6 meses, y el 10,27 por ciento ha realizado dieta para adelgazar. La proporción de mujeres que realizan dieta es superior a la de hombres y en el grupo de mayor edad hay menos personas que realizan dieta.