Durante estos días de navidad es habitual reunirse con la familia o amigos alrededor de la mesa, que por lo general está repleta de comida y bebida con mas calorías de las que deberíamos comer.
En las comidas o cenas de los días de fiesta conviene no hacer más de una concesión por comida.
Para una buena elección y por tanto combinación de los platos navideños, es mejor planificar de antemano qué se va a pedir si estamos fuera de casa o bien qué se va a cocinar. Esto nos va a evitar sorpresas tras la comida y pensar que nos hemos pasado con el ingreso calórico.
Por otro lado, en estas fechas no hay que perder de vista el ejercicio físico. Si ya se tiene costumbre de practicar alguna actividad no hay porqué dejar de practicarlo durante las navidades, que es cuando se supone se tiene un poco mas de tiempo libre.
En el caso de que normalmente no se lleve a cabo ningún tipo de deporte, no es necesario que en Navidad se comience a ir a un gimnasio ni realizar ejercicios extenuantes. En estos casos es suficiente con acostumbrarse a pasear unos minutos al día en vez de estar en casa, ir andando a los sitios en lugar de coger el coche, bajarse del autobús una parada antes de la deseada para terminar el trayecto a pie o simplemente sustituir el ascensor por las escaleras.
Es importante no olvidar que la alimentación juega un papel fundamental a la hora de prevenir el aumento de peso, por lo que durante estos días, nada mejor que combinar un poco de ejercicio con unos hábitos alimentarios lo más saludables posible.
Felices Fiestas!
Isabel Rubio
Psicología IntraObes